- Usar el secador muy cerca o a su máxima potencia para secarte el pelo, igual que tenacillas, planchas o rizadores. Son fuentes de calor que rompen la fibra capilar y desvanecen el brillo y la elasticidad. Seca el cabello al aire o, si necesitas algún utensilio, aplica un producto que lo repare.
- Utilizar gomas que corten: Son fatales, porque rompen el pelo. Para hacerte la coleta, usa gomas recubiertas o prendedores originales que no lo castiguen.
- Llevar el pelo aplastado: En moda capilar, la consigna de este año es volumen. No luzcas el cabello lacio, aplastado o pegado al rostro. Ponte un producto específico que le dé cuerpo a tu pelo.
- Ir a la playa "muy peinada": Ni cardado, ni con moño... A la playa ve siempre con el cabello limpio y natural. Si acaso, puedes crear en tu melena un "efecto despeinado".
- No protegerlo del sol: Los daños que produce el sol en el cabello son desastrosos, especialmente si está teñido. No lo expongas al astro rey sin una gorra o un sombrero que cubra tu melena y, además, un producto que lo proteja de los nocivos rayos; como por ejemplo el Fotoprotector ISDIN Hair Fluid, un protector solar que hidrata y mantiene la elasticidad del cabello.
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